Capitulo 27: Abans Del Diagnòstic {Antes Del Diagnostico} 

Kyo y Alex llegan al hospital, lentamente los dos entran por la puerta automática principal, que se abre mecánicamente para dejarlos entrar, el joven Kusanagi puede oír el ruido que hacen al abrirse, hace un gesto de desagrado al entrar, el olor a hospital le parece asfixiante, las voces de los médicos y enfermeras, algunos riendo, otros ocupados intentando salvar la vida de alguien, gritando a por más ayuda, más sueros... Pasos acelerados, lentos, tranquilos, inseguros... gritos de dolor, de tristeza, pequeños sollozos apagados, risas de felicidad. Kyo intenta concentrarse solo en los pasos de Alex para no tener que oír nada, aunque le resulta casi imposible... los pasos del ninja se oyen como siempre... silenciosos, pero algo más lentos y torpes... en verdad le debe haber dolido...

El ninja se acerca al mostrador donde una enfermera está hablando por teléfono con una de las plantas del hospital, completamente ajena al joven medio rubio y de ojos verdes que tiene enfrente... continua hablando un buen rato, a Alex le parece que está hablando vanalidades... tonterías... le duele el estómago por culpa del golpe y no está para esperar, así que da un golpe en el mostrador para que la enfermera lo vea, los vea a los dos... Esta se gira con cara algo molesta al principio, claro, la han interrumpido, pero se apresura a poner la cara más amable que tiene al ver a los dos jóvenes, a los dos hermosos jóvenes que tiene enfrente.

-          Venimos a ver al doctor Matsuda – dice Alex en voz seca, mirando fijamente a la enfermera. No le agrada en nada este tipo de gente... tan... falsos.

-          Tienen hora? – pregunta la enfermera solicita mirándolos primero a uno y luego al otro, el rubio es algo más bajo, pero eso no le quita atractivo, sus ojos verdes son de envidiar, es extranjero, no hay duda, pero es un hermoso extranjero... y a parte... habla muy bien el japonés. El otro joven parece algo despistado, no la mira, pero ella puede ver unos ojos oscuros bajo unos mechones castaños, parece que esté mirando algo pero la enfermera no sabe el qué, es más alto que el rubio, sus músculos están más marcados.

-          No, pero me dijeron que viniera, mi nombre es Kusanagi Kyo – habla al fin el joven de cabello castaño y la enfermera no puede evitar sorprenderse ante la hermosa voz del joven.

-          A ver... un momento por favor... – dice la enfermera mientras consulta su ordenador, inserta el nombre: Kusanagi Kyo... espera unos segundos... y aparece el nombre del joven junto al diagnóstico del doctor y también una anotación diciendo que esperan a Kusanagi Kyo para una visita... va a decirles que avisará al doctor pero antes de eso mira el diagnóstico y se queda quieta mirando la pantalla sin creerlo: ceguera permanente... levanta la vista incrédula... mirando al joven castaño sin creérselo. El joven... parece... normal y en estos momentos la mira fijamente – Debo haberme equivocado... – murmura la enfermera volviendo a poner la vista en la pantalla.

-          Por? – pregunta Kyo inclinándose ligeramente en el mostrador, sabiendo donde está la enfermera, sus ojos abiertos, profundos.

-          Oh... verá... es que aquí pone que usted... está... – titubea la enfermera al ver los hermosos ojos oscuros del joven, imposible que esté ciego.

-          Ciego? – pregunta Kyo sonriendo... la verdad le divierte hacer esto... evidentemente que no le gusta estar ciego, claro, pero al menos puede hacer que la gente crea que no lo está... oye un ligero respingo por parte de la enfermera.

-          Kusanagi-san! Me alegro que haya venido – dice el doctor Matsuda acercándose al joven, su cabello ya casi totalmente gris cubriendo parte de sus ojos, que a la vez también están cubiertos por unas lentes. Alex lo mira y lo reconoce... cuando lo vio no llevaba lentes pero sí es el doctor que atendió a Kyo.

-          Yagami-sama me llamó – explica Kyo volteándose hacia donde oye la voz del doctor y posando una ligera sonrisa en su rostro.

-          Bien, bien, perfecto – dice el hombre sonriendo – Oh usted también vino, verdad? – le pregunta a Alex reconociendo al joven que vio con los Kusanagi. El doctor se acerca más a ellos tocando el hombro de Kyo, este nota como si el doctor siempre estuviera nervioso, por el gesto y por los movimientos que nota de él. El doctor Matsuda tiende una mano al joven rubio quien la acepta.

-          Sí, yo también vine – dice con una medio sonrisa, mientras sigue con su otra mano en el estómago. El doctor puede verlo y mira curioso.

-          Potser hauries de deixar que et mirés el metge, Alex {Quizás tendrías que dejar que te viera el médico, Alex} – dice Kyo volteándose un poco hacia su compañero, su voz es algo fría y lejana, y su tono algo burlón... sabe que Alex no se va a dejar ver ni se dejaría aunque se estuviese muriendo, sabe que rehusa cualquier tipo de contacto... aunque claro, ahora está muy cercano a Benimaru... pero está seguro de que no dejará que este se le acerque demasiado.

-          Ja saps que no vull {Ya sabes que no quiero} – dice Alex sin darle importancia al tema y dejándolo por terminado... Kyo en verdad ya sabía esta respuesta... y quizás lo ha dicho en tono de burla, quizás esté molesto con Alex... pero sabe que el golpe le duele, nota que cada vez que el ninja respira le resulta doloroso. El doctor Matsuda observa curioso... con sus ojos mirando a uno y luego a otro...

-          Catalán? – pregunta poniéndose en la conversación, Alex lo mira algo sorprendido, claro... no se había dado cuenta... Este doctor tiene rasgos japoneses, pero también tiene rasgos algo europeos – Mi madre era francesa – explica el doctor al ver la cara sorprendida del ninja.

-          Doctor... para que quería que viniera? – pregunta Kyo algo cortante... no le gusta estar en el hospital, quiere salir lo antes posible.

-          Ah, sí, claro... Vengan conmigo – dice el doctor empezando a andar y dirigiéndose hacia un pasillo con distintas puertas, algunas abiertas otras cerradas, son despachos o pequeñas consultas de urgencias o pediatría, Kyo puede oír a diferente gente conversando... que si el niño tiene la varicela, que si hay que operar, que si es mejor amputar... Kyo sacude su cabeza nervioso, Alex está a su lado con una mano en su brazo. El doctor se detiene ante una puerta y la abre, dejando pasar a los dos jóvenes. Alex se detiene enfrente de una silla y Kyo también, haciendo que su mano vaya hacia delante roza el respaldo de la silla, lo coge y se sienta lentamente, el ninja a su lado. El doctor mira bastante asombrado como Kyo es capaz de hacer casi de todo y solo con una ligera ayuda... le parece asombroso. Se dirige hacia ellos y los rodea para sentarse detrás de una mesa de despacho bastante amplia con un ordenador y miles de papeles encima, la mesa fría, de roble. El despacho es amplio, cosa que da a entender que el doctor Matsuda no es un simple médico de cabecera. Alex mira las paredes del despacho, están llenos de diplomas, y no todos del Japón, algunos, puede ver, son de Europa y América, muchos estantes y todos llenos de libros sobre medicina – Bueno... verá Kusanagi-san... cuando usted estaba inconsciente le hicimos los análisis que deben de hacerse cuando alguien ingresa de la forma que lo hizo usted... – empieza a explicar el doctor con cara más seria, Kyo puede notar por el tono de su voz que no tiene buenas noticias – Le hicimos análisis de sangre... que salieron completamente bien... eso sí... Pero... – el doctor toma algo de aire... y se quita las gafas lentamente.

-          Pero qué? – preguntan Kyo y Alex a la vez, los dos algo molestos por que el doctor haya parado. Kyo se echa hacia atrás en el respaldo... qué más puede pasarle ya? Ojalá le dijeran que solo le queda un día de vida, piensa mientras aprieta sus puños con fuerza, en verdad no se arrepiente de pensar eso, no, por qué no puede descansar de una buena vez? Por qué le ha de estar pasando esto!?

-          Ejem... verán... – dice el doctor aclarándose la garganta – Le hicimos también un TAK por si acaso... para comprobar si había golpes internos en su cabeza... no vimos nada y lo dejamos... pero... hoy mismo... revisando he visto algo extraño en una parte del cerebro... por eso le he pedido a Yagami-sama que lo llamara, no teníamos su número – tanto Kyo como Alex se quedan quietos... sin saber que decir... algo en el cerebro? Piensan los dos... el ninja no puede evitar mirar a su joven amigo, con expresión triste y preocupada, muy preocupada. Kyo parece sumido en un mar de pensamientos... está intentando asimilar las palabras del doctor... – Pero tranquilo, no creo que sea nada de importancia – dice el doctor Matsuda intentando calmar la situación y quitarle importancia – Tenemos que hacerle el TAK de nuevo... ya verá como no es nada – acaba diciendo mientras sonríe, más para Alex que para Kyo... el ninja no puede evitar expresar su preocupación... qué es lo que tiene? Maldición! Por qué todo le tiene que pasar a Kyo? Alex daría cualquier cosa, cualquiera, lo que fuera, para cambiar lo que le está pasando a su hermano pequeño... se cambiaría por él! Maldita sea! Moriría por él!

-          Qué cree usted que es, doctor? – pregunta Kyo levantando su rostro, serio, sin parecer afectado... pero Alex ve como su amigo tiene los puños fuertemente cerrados. No puede evitar susurrar su nombre en voz baja y poner una de sus manos sobre la de Kyo, este no se inmuta y continua con el rostro hacia enfrente...

-          No puedo decirle nada... tenemos que hacer el TAK primero – dice el doctor levantándose lentamente de su silla.

-          Ahora? – pregunta Alex confuso, el doctor asiente y un ligero Sí, sale de su boca... si lo que han visto en el TAK del joven no es un error más vale saberlo rápidamente. Kyo se levanta de la silla, Alex no le suelta la mano y esto hace que el ninja tenga que levantarse algo bruscamente, y no puede evitar un ligero quejido, se queda apoyado en la mesa... soltando la mano de Kyo para pasársela por su estómago. El doctor se acerca un poco al ver el gesto del ninja.

-          Me permite – dice con gesto profesional poniendo una mano en el hombro del joven ninja y volteándolo para mirar su estómago. Aparta la mano de Alex y él pasa la suya para comprobar haciendo un leve toque para ver si hay alguna costilla rota, de pronto nota algo frío en su garganta, levanta la vista y ve unos ojos verdes molestos y una mano sujetando lo que debe ser un cuchillo, aunque no lo puede ver bien...

-          No-me-toque – susurra Alex, molesto ante el ligero contacto, sus ojos verdes molestos, hace mucho que detesta que le toquen... mucho tiempo y últimamente le parece que todo el mundo se está tomando muchas libertades con eso. El doctor lo mira sorprendido... bueno, no es el primer paciente que se encuentra que lo trate así, en su momento Yagami-sama hacía lo mismo, pero con llamas púrpura... por suerte con el tiempo se fue calmando.

-          Está bien, tranquilo, pero creo que debería tener cuidado, me parece que debe tener un par de costillas rotas – le señala el doctor Matsuda con un tono de reproche mientras se aparta del cuchillo lentamente – Al menos debería dejar que lo vendara – le señala mientras abre la puerta. Kyo se queda quieto al oír esto, en verdad sabía que el golpe había sido fuerte, pero... tanto? Alex ignora el ofrecimiento del doctor y se guarda el cuchillo en la espalda mientras pone una mano detrás el brazo de Kyo, muy levemente, solo para guiarlo si hiciera falta, pero Kyo no se mueve.

-          Hauries de posar-t’hi venes {Tendrías que ponerte vendas} – le recrimina Kyo pero con la vista enfrente... no es que no sepa dónde está Alex; sí lo sabe, lo que sucede es que no quiere mostrarse preocupado, aunque lo está... sabe que se está comportando con un niño, recriminando a quien no debería... pero bueno... Alex se fue de la lengua, no tendría que haberlo hecho.

-          No, ja estic bé {No, ya estoy bien} – dice Alex en tono bajo intentando que Kyo empiece a andar, el doctor los mira curioso... puede entender alguna palabra suelta pero pocas. El joven Kusanagi le parece que está muy frío y el rubio... bueno no parece molesto pero tampoco parece interesado en hacer lo que sea que le esté diciendo.

-          No estàs bé, fes el que et dic, Gaunier {No estás bien, haz lo que te digo} – dice Kyo volteando al fin su rostro hacia Alex, como si lo mirara directamente a los ojos y estuviera molesto... el ninja no puede evitar sentirse mal... Kyo le ha llamado por su apellido... eso solo lo hace cuando está burlándose de él o cuando está molesto y ahora no se está burlando. Kyo espera pacientemente una replica por parte del rubio, como también está preparado para gritarle si hace falta.

-          D’acord {de acuerdo} – dice Alex simplemente, su voz normal, algo mecánica. Kyo se sorprende un poco... no esperaba que Alex aceptara así como así.

-          Y bien? – pregunta el doctor observando algo curioso la escena, esperando pacientemente a que los dos jóvenes terminen de hablar.

-          Vamos – dice Kyo levantando el rostro haciendo que sus mechones se muevan con el movimiento, empieza a andar con Alex al lado. El doctor los guía hacia una sala al final del pasillo, allí hay una enfermera, detrás de una pequeña mesa observando diversos papeles y comparándolos. El doctor Matsuda se acerca a la enfermera para hablar con ella mientras Kyo y Alex esperan pacientemente en medio de la sala, Alex la observa, no es muy grande... puede ver que hay un cristal que separa esta sala de una más grande donde hay una enorme maquina de color blanco, tan blanco que dañaría los ojos. En medio tiene un agujero y una fría tabla de metal plana para que los enfermos se tumben en ella. Kyo no dice nada, se mantiene firme, pareciendo calmado, ha cerrado los ojos... está cansado, no puede evitar que el olor a hospital le dé repulsión... siempre que ha ido a uno ha sido para algo relacionado con sus combates y ahora... qué le van a decir? Qué es lo que ha visto el doctor? No le ha querido decir nada y eso, para él, no es una buena señal... pero tenga lo que tenga una cosa está clara... no se va a quedar en el hospital – Kusanagi-san – oye como el doctor lo llama y voltea su rostro hacia donde ha oído la voz – Mire tiene que ir a otra sala y tumbarse, tendrá que estar durante una media hora quieto – le va explicando el doctor gesticulando mucho. Ve que Kyo hace un gesto de desagrado al oír el tiempo – Bueno, puede que sea menos – explica amablemente, el chico le parece que está a punto de estallar, aunque no lo parezca... ha visto muchos casos así y sabe que lo mejor es mantener siempre el ambiente calmado y relajado – Tendrá que quitarse la ropa de cintura para arriba, puede dejarse los pantalones tranquilamente – dice tranquilamente, no es que se pueda dejar que los pacientes se hagan el TAK con pantalones, pero al fin y al cabo solo lo necesita de la parte de la cabeza, además esto le irá bien para relajar al joven. La enfermera se acerca a Kyo, este lo nota, como también nota como la enfermera le coge gentilmente un brazo para guiarlo a la sala.

-          Mientras tanto mire que es lo que tiene Alex – dice Kyo volteándose justo antes de entrar, sus ojos abiertos y el ninja ve que hay un poco de preocupación en ellos, aunque estén muertos los sentimientos siguen reflejándose, pero el tono de voz de Kyo es duro, intentando parecer como si no le afectara.

-          Muy bien – dice el doctor. La enfermera se lleva a Kyo a la sala donde está la máquina, Alex puede ver, a través del cristal, como Kyo se saca la ropa de cintura para arriba... ve algunas cicatrices en su pecho... Kyo les había dicho a él y a Benimaru que se había peleado con Yagami... pero al ninja no le parecen cicatrices de peleas... se ven... diferentes... no sabría explicarlo pero empieza a pensar que lo que dijo ese pelirrojo, Azumi, es verdad. Cierra los ojos fuertemente mientras aprieta sus puños... si es cierto... si Yagami lo ha violado... cómo puede Kyo estar así? Por qué no grita? Por qué no golpea a alguien o algo? Por qué tiene que quedarse así? Él es su amigo, Kyo sabe que él es el único que lo podría entender, que lo podría ayudar... – Por favor, venga conmigo – dice el doctor sacando a Alex de su ensimismamiento, el ninja lo mira fríamente, pero lo sigue hacia otra pequeña sala, justo enfrente. Una pequeña camilla cubierta con una sabana de color verde, una pequeña mesa con un ordenador y diferentes aparatos para comprobar el estado de los pacientes – A ver... puede quitarse la parte de arriba? – dice el doctor mientras busca algo entre los aparatos. El ninja no se mueve y eso hace que el doctor Matsuda lo mire extrañado.

-          Kyo ha dicho que tendría que ponerme vendas, y eso haré, pero yo solo... déjeme algunas y yo mismo lo haré, solo necesito quince minutos – dice Alex fríamente, cruzando los brazos en su pecho, dándole a entender al doctor que no va a admitir ninguna replica. Este hace un suspiro de resignación, no entiende bien la terquedad del joven, pero no puede hacer nada, y tampoco podría hacerlo si le cortaran el cuello... así que busca unas vendas en un cajón y las saca, dejándolas encima de la camilla. El ninja sigue sin moverse, así que no le queda otra opción que salir de la habitación. Cuando el doctor sale Alex se dirige a las vendas y las coge – Kyo... por qué no me dices la verdad? – dice mientras siente como una lágrima baja por su mejilla.

Mientras tanto en la habitación donde está Kyo, este ya se ha quitado la parte de arriba de su ropa y la enfermera le ayuda a tumbarse, siente el frío de la tabla en su espalda, aunque hay una pequeña sabana el frío pasa a través de ella. Puede notar que la tabla es bastante estrecha y oye como la enfermera le pide una y otra vez que sobretodo no se mueva, que aguante quieto, que sino lo tendrían que repetir. No hace mucho caso a las palabras, él quiere que todo termine y que sea rápido. La enfermera sigue explicándole que puede que la máquina haga un poco de ruido, que no se preocupe por ello. El joven Kusanagi empieza a cansarse de estar escuchando a la enfermera y esta parece notarlo, así que al final le dice que puede probar de dormirse, que hay gente que lo hace y se retira al fin, pero no sin antes decir que si tiene algún problema que lo diga que ella estará escuchando. Kyo suspira mientras oye como la enfermera entra en una habitación, pero no es la misma por donde han entrado, es otra donde están los comandamentos de la máquina. La voz de la enfermera lo avisa; a partir de ahora que intente no moverse.

Kyo empieza a sentir como la tabla donde está tumbado se mueve, tiene un pequeño cojín en la cabeza que hace que la incomodidad no sea tan insoportable. Siente como va moviéndose y puede notar, sin necesidad de moverse, que está en una especie de tubo, pero corto... quizás mida solo un metro de ancho, pero es lo suficiente como para que se ponga nervioso. La máquina empieza a hacer ruido, no muy fuerte pero en estos momentos cualquier cosa es capaz de alterarlo... Intenta relajarse, pensar en cualquier otra cosa... pero lo único que se le viene en mente es... Iori... está algo preocupado... no sabe que es lo que pretende Azumi... Intenta analizar un poco la situación... Azumi se metió en el cuerpo de Iori, de eso está completamente seguro, luego parecía tener prisa y estar molesto, pero le parece que no era con él... sino molesto en general... quizás con otra persona... pero quien? Iori? No, no puede ser... sino no tendría que haberse ido de la forma en que lo hizo... Aun estará dentro del cuerpo de Yagami? Se va preguntando Kyo mientras empieza a sentir una ligera presión en su pecho, preocupación? No puede ser, se dice... Azumi parecía no encontrarse muy bien, en sueños ya lo ha visto dos veces pareciendo que se iba a morir y ahora lo ha notado en la realidad... Se repite una y otra vez que solo debe ser un juego del Asesino... que solo se debe estar burlando de él... pero... en su interior está casi seguro de que no todo es un juego... a Azumi le pasa algo, si es algo grave no lo sabe pero que hay algo extraño, lo hay...

Alex entra en la habitación donde el doctor Matsuda les ha llevado, este está allí observando tranquilamente como el joven Kusanagi está siendo explorado por la enorme máquina. El doctor se sorprende un poco ante la velocidad del joven, porque no han pasado casi ni diez minutos desde que lo ha dejado. Alex puede ver la mirada algo preocupada del doctor y se levanta levemente la ropa solo para que el doctor pueda ver las vendas por encima del pantalón, este se acerca un poco al joven rubio y con una mirada pregunta si puede tocar un poco los vendajes, le interesa ver si están bien sujetos. Alex afirma levemente pero amenazante, si el doctor Matsuda hace un movimiento que no le guste... pronto se quedará con el cuello cortado, ambos lo saben, así que el doctor roza levemente los vendajes y pasa un poco los dedos por debajo de las vendas para comprobar si están bien tensadas. Tienen que estar tensas pero sin ahogar... y ve que están perfectamente puestas. Levanta su mirada para ver el rostro del ninja, asintiendo en forma de aprobación. Alex le ofrece una sonrisa burlona... es evidente que están bien puestas... al fin y al cabo siempre ha estado poniendo y sacando vendas, por ejemplo a sus compañeros, o a él mismo, ya que no deja que nadie lo haga... Piensa un poco en la suerte que tiene de formar parte del grupo especial... estando en él las peleas no son muy constantes pero... si se pelean, en general, las luchas son fuertes pero estando con su grupo las cosas parecen siempre muy fáciles y las heridas en general no son grabes... algunas veces han tenido golpes fuertes o cortes profundos pero ellos mismos se ocupan de curarse... en general el más herido es Hiroshi... por meterse... con Kaiji... Dios! No sabe ya cuantas veces Kaiji ha apuñalado a Hiroshi... no sabe como lo hace Kaiji pero siempre le ha apuñalado en lugares donde no hay órganos vitales, así que Shikai y él ya han aprendido a no preocuparse ‘tanto’ cuando eso pasa, como paso hoy mismo.

Alex desvía la mirada para ver a Kyo tumbado, siente como el corazón se le encoge al verlo así. Un recuerdo olvidado llega, sí, el ya había visto esto antes... y fue justamente con una puñalada que le dio Kaiji a Hiroshi... en el omoplato... Hiroshi había caído y se había golpeado la cabeza y no reaccionaba... de eso hacía ya muchos años, recuerda claramente que fue la primera y última vez que vio a Shikai gritándole a Kaiji, jamás había oído ni visto a Shikai gritando furioso. Kaiji simplemente se había ido, quizás para no oír más o por puro hastío. Así que tuvieron que llevarlo al hospital entre Shikai y él. Y ahora puede recordar claramente que también pusieron a Hiroshi allí, para ver si tenia alguna contusión... todo salió bien, Hiroshi no tenía nada, solo se tubo que quedar en el hospital porque le habían cosido la herida. Él y Shikai se quedaron con Hiroshi... este estaba bastante bien seguía con sus bromas aunque a veces le dolía la cabeza... pasaron un par de días en el hospital... incluso Kyo le había ido a visitar, pero no había rastros de Kaiji por ningún lado... Al final regresaron a casa con Hiroshi, y allí estaba Kaiji, preparando la cena como si nada hubiera pasado, la mesa estaba servida... recuerda la ansiedad que sintió cuando Hiroshi saludo a Kaiji... “Hola enano!”. Nunca llegaría a entender el comportamiento de Hiroshi... y tanto él como Shikai se tensaron y estuvieron a punto de decirle al revoltoso joven que se callara, pero antes que pudieran decir nada Kaiji ya había respuesto con un: “No tanto como tu” seco, mientras dejaba la comida en la mesa. Hiroshi se había puesto a reír ante el comentario y la cena fue muy tranquila... pero por la noche... cuando se despidieron para irse a dormir... oyeron un fuerte grito que provenía de la habitación de Hiroshi. Salieron corriendo, cada cual de su habitación y entraron casi derribando la puerta solo para encontrarse a Hiroshi sonriendo y señalándoles la mesa de su habitación... había un teléfono, un ordenador y una radio... y ninguna de las tres cosas las habían visto antes. Recuerda como él y Shikai se habían mirado extrañados, vieron a Kaiji detrás de ellos observando la escena con cara de pocos amigos. Hiroshi se había dirigido hacia él sonriendo y sin más lo había abrazado... Alex había oído un gracias de los labios de Hiroshi. Kaiji no dijo nada pero tampoco se aparto ni alejo a Hiroshi de él... así que fue él quien le había regalado eso a Hiroshi... Ese recuerdo había quedado olvidado pues no lo volvieron a mencionar más... Y ahora se le había aparecido como un reflejo al ver a Kyo tumbado en la misma plancha fría...

-          Ya está – oye que dice la enfermera. La tabla empieza a moverse para hacer que Kyo pueda salir. La enfermera se dirige a él... por suerte el tiempo le ha pasado más o menos rápido, aunque hubiera preferido poder pensar en otras cosas que no en el par de pelirrojos, podría decir que son su obsesión... no puede dejar de pensar en ellos ni un solo segundo y ya empieza a estar harto. La enfermera pone una mano en su hombro para indicarle que ya se puede levantar, así lo hace. Alex no puede dejar de observarlo... parece que su cuerpo está sano, preparado para luchar pero... cómo puede preguntarle a Kyo si lo que Azumi dijo es verdad? Kyo ya le había dicho que no lo era... pero... esas cicatrices... se fija en una en su cuello, no se había dado cuenta antes o la había tomado por una herida normal... pero no lo es... eso no es una herida... es una mordida! Cómo no se había fijado en eso! Sus ojos se abren por la sorpresa y pone una mano en su boca, cubriéndosela, sintiendo como las lágrimas están en sus ojos.

Kyo sale acompañado por la enfermera y Alex se le acerca con pasos rápidos para acabar rodeando su cintura con sus delicados brazos y apoyando su cabeza en el pecho de Kyo, este se sorprende, claro, no se esperaba esto. Sabe que es Alex pero lo que no sabe es por qué lo abraza, oye un ligero sollozo... acaso la herida del ninja es más grave de lo que él pensaba?

El doctor y la enfermera miran algo curiosos la escena, pero al final se van dejando a los dos jóvenes un momento a solas, mientras ellos van a revisar como han salido las imágenes del TAK.

Kyo sigue sin entender bien lo que le está pasando a Alex, está bastante confundido.

-          Oi, Alex, qué pasa? – pregunta Kyo sin poder ocultar su tono preocupado y poniendo sus manos por la espalda de su amigo. Alex no se mueve, solo sigue abrazándolo.

-          Nada... – susurra Alex apartándose ligeramente para mirar el rostro de Kyo, ve que tiene los ojos abiertos, cubiertos ligeramente por mechones castaños. Alex levanta un poco su rostro y besa ligeramente los labios de Kyo quien se queda sorprendido, el ninja tampoco sabe porque lo ha hecho... pero necesitaba hacerlo, como antes en la habitación de invitados – Te quiero... hermanito