Kyo llega a la escuela corriendo

- ¡A un lado por favor!

- ¡¡KYO!! - Paro en seco-

- Dime Kary

- ¿ Adónde vas con tanta prisa?

- ¡A presentar mi examen!

- ¿Qué no recuerdas? Los exámenes se corrieron hasta las 12:00 del día…

- Dime que no es cierto…

- Si, en efecto, pero creo que estabas pensando en quién sabe que o QUIEN cuando lo dijeron…

- ¡ AHH NO!

- Entiendo tu frustración, pero mira, llegaste más temprano de lo acostumbrado…

- No es eso … sólo me enoje en vano contigo para que resultara esto -pensaba en voz alta-

- ¿Quién?

- ¿Quién qué? - no se dio cuenta de que se le habían ido de más las palabras-

- ¿Con quién te peleaste antes de llegar?

- Eh…

- Kyo?

- No, con nadie, es sólo que ya no sé ni lo que digo

- Mmh, bueno, esta bien, vámonos al salón, no querrás llegar tarde otra vez

- Te alcanzo enseguida, tengo que ir al baño

- Esta bien

Kyo entra en el baño y ve que no hay nadie, desata su cola de caballo y moja la cabeza en el lavabo, se mira en el espejo y siente ganas de que se lo trague la tierra...

- Dioses... si Iori se llega a enterar.

-« señor histeria» recordó-

- Tal vez… no, eso no esta bien. Es hora de ir a clase

Salón 604 Álgebra. 11:30

- En media hora es el examen muchachos, espero que estén listos

- Claro que lo estoy - dice Kyo para sí -

- ¿Lo estás Kusanagi?

- Sí

- Je je, que bueno, porque no estudie NADA

- ¡Tai!

- Solo bromeo…

Dos horas después, mismo salón, misma clase

- Aquí está mi examen profesor, ¿ya puedo retirarme?

- Claro señor Kusanagi, que tenga buen día

- Arigatou.

Camina por el pasillo, directo a la salida y…

- ¿ Adónde crees que vas, eh Kyo?

- A mi casa

- ¿Quieres que te acompañe?

- No, tengo cosas que hacer, como por ejemplo, estudiar para el examen de mañana, ¿y tú?

- Si quieres podemos estudiar juntos

- No quiero ser grosero, pero tengo aparte que arreglar algunos problemas

- Con...

- Con nadie, hasta mañana

- Hasta mañana Kyo-chan

En la estación del metro, Kyo medita sobre lo ocurrido en el transcurso de la mañana

- "Vaya día, ¿porqué tiene que pasarme esto a mí?, Espero que Iori no se entere, por lo menos hoy, del cambio de horario de los exámenes, sino, creo que me calcinará, y eso si me va bien."

- " ¿Kyo-chan?, ¿Desde cuando tanta confianza?, que importa, necesito llegar a preparar algo de comer por que de seguro el señor Bueno Para Nada se ha de estar muriendo de hambre "

- " Y a tratar de estudiar un poco, si es que los ensayos de Iori me lo permiten"

4:00 p.m.

- Iori, ya llegue…

- Que bueno, ¿Cómo te fue?

- Creo que saldré bien ¿y tú, que hiciste?

- Extrañarte

- ¿Sólo eso?

- Mmh… no, también dormir un rato

- Vaya, que interesante...

- Ups...

- Je, esta bien, preparare algo para almorzar -se quita la gabardina y la deja en el sofá, junto con su mochila-

- ¡ Pero que no sea arroz con vegetales otra vez! -comenta el pelirrojo mientras caminan a la cocina-

- ¿Entonces, que quieres comer?

- Algo que lleve carne por favor, ¡estoy harto de tanta verdura, me siento oruga!

- ¿Qué te parece si hago albóndigas?

- Genial, y de tomar…

- Cerveza

- Estupendo, avísame cuando esté listo - da la media vuelta y se dispone a irse-

- ¡Un momento, si quieres las albóndigas tendrás que ayudarme en la cocina!

- Sabes que soy un desastre en los quehaceres de la casa.

- Sólo te lo pido por esta ocasión, mañana tengo examen de inglés y sabes que no tengo cabeza para eso.

- Esta bien, ¿qué quieres que haga?

- Déjame ver… podrías… acomodar la despensa y luego lavar los trastes, además, tengo que ir a comprar la carne.

- Hecho…

- Y una cosa más…

- ¿Podrías suspender tu ensayo hoy?

- Creo que exageras un poco con eso de estudiar

- Hum… creo que haré verduras de nuevo

- ¡De acuerdo, de acuerdo! Con tal de no comer verduras por hoy…

- Gracias, por eso te quiero… no tardaré mucho

- Chantajista

- Zángano

Yagami guarda la despensa con algo de trabajo, pero al cabo de un rato logró acomodar todo en la alacena - bastante mal, por cierto - y ya estaba en el fregadero, había lavado con bastante éxito las tazas y los vasos y se disponía a seguir con los platos. Kyo, por su parte estaba en un supermercado no muy lejos de casa

- Vaya, pensé que sería más difícil esto del que hacer -decía Iori para sí - ya casi termino

- ¿Cómo te esta hiendo? -preguntó Kyo que ya había regresado-

- Nada mal, mira que fácil es...

- Voy a preparar la mesa, dejaré esto calentando, ¿de acuerdo?

No había ni dado tres pasos cuando se oyó un gran estrépito detrás de él

- Déjame adivinar, se te resbalaron los platos... - decía aún de espaldas-