Autor: LSX

Boushin no Hono

Capitulo 3: Cenizas

Viernes 24 de mayo / Casa de Kyo.

Al día siguiente de enterarse de que había un torneo, Kyo ya estaba enterado que Chizuru no había organizado el torneo, pero no le importó "Un torneo es un torneo", pero Yuki ya se estaba preocupando:

-No vayas, algo me dice que no saldrá bien- al cabo que lo abrazaba. -Creí que tu querías que yo fuera, pero ya quedé con Benimaru y Goro de ir con ellos. Ya hasta sacamos los boletos de avión- contestó Kyo. Benimaru dijo -Si quieres, ven con nosotros, no serás una carga, además la televisora que organizó esto nos dará un boleto extra para nuestro representante y podemos decir que tu eres- y Yuki, feliz fue a pedir permiso a su mamá, seguro le daría permiso.

Kyo iba a reprochar la intromisión de Benimaru, pero si lo hacia podía despertar dudas sobre los rumores que se habían dado "Vaya, y pensar que igual y buscaba a alguien más" pensó. Benimaru tomó el teléfono y marcó a su casa, Minna le contestó -Bueno?-, Benimaru le dijo -Estoy pensando en un número del 1 al 1000, ¿cual es?-, la chica intentó adivinar -¿3?- con lo que Benimaru dijo -Bien contestado, te has ganado un premio.

Kyo veía eso muy raro -¿Qué haces?- y Benimaru le guiñó el ojo -Observa-, Minna preguntó cual era el premio -Te quedarás en mi casa hasta que yo vuelva del torneo, y a propósito... ¿estás en un departamento?, mándalo al pasado, ahora vivirás en mi casa-, la pobre asistente se sintió impactada -¿Es en serio? ¿y cuando vuelva usted qué haré?-, Benimaru, con seguridad explicó -Con lo que gane en el torneo haré una recámara para ti, ¿contenta?- la chica grito por el teléfono -Luego te veo, ve a decirle a tu casero que ya no lo necesitas, iré por mis maletas en 2 horas, chao!

Benimaru vio fijamente a Kyo, este le preguntó -¿Que tan seguro estás de que ganaremos?- el respondió -Ninguna, pero ¡qué bien se siente esto! ¿a qué hora sale el avión?-, Kyo contestó -A las 21 horas, tenemos todo el día para despedirnos de nuestros amigos... ¿por qué se lo dijiste por teléfono?-, Benimaru vió al piso y dijo -Bueno, no quería que se me lanzara al cuello... es muy pesada.

Kyo tomó su casco y las llaves de su motocicleta -¿A donde vas?- preguntó Benimaru -Voy a dar una vuelta... tengo que correr un rato.

***

14:52 horas, Afueras de la ciudad de Tokyo

Kyo iba por la carretera corriendo en su motocicleta, se sentía libre de todos sus problemas, su casco tenía el vidrio polarizado, así que nadie lo reconocería. Observaba al lado de la carretera: se estaba alejando de Tokyo y estaba entrando al bosque, sabía que tenía aún 5 horas para ir al avión así que quiso ir un poco más lejos.

A la media hora vio a alguien en la orilla de la carretera, no vio ninguna señal de algún accidente o algún carro descompuesto, así que bajó la velocidad. Se detuvo a unos 50 metros del sujeto, estaba vestido de un traje oscuro como si fuera de luto... sus mangas fuera de su saco... y su cabello rojo -¿Será él?- y el sujeto salió de la carretera y entró al bosque. -Tengo que seguirlo- se dijo y miró que había un refugio para cazadores a unos metros -Dejaré la motocicleta-. En unos minutos Kyo estaba siguiendo al tipo de luto.

Bajó un sendero, pasó por los árboles y buscó al joven, vio una lejana figura alejarse por un camino, corrió a alcanzarlo. Caminó por lo menos 2 horas -Rayos, si no me acerco a él no podré saber si realmente es Iori... no tengo mucho tiempo-, se estaban adentrando mucho al bosque, en un momento Kyo perdió de vista al joven -Bah! mejor me voy- pero al darse vuelta se encontró con un raro árbol: tenía una luna creciente marcada.

-¿Qué es este lugar?- decidió seguir caminando, en unos minutos se encontró con una pequeña casa hecha de madera: y totalmente quemada. Se notaba como la casa había sido consumido por las llamas ya hace mucho tiempo, caminó hacia ella y observó que había más casas -Es una aldea-, una voz detrás de él le dijo:

-Era una aldea... el lugar en el que menos pudieras estar.

Kyo se dio vuelta, vio a Iori con temor -¿Qué haces tu aquí? - preguntó Iori, Kyo sólo pudo mentir:

-Yo... te ví en la carretera... quería saber si entrarías al torneo-, él rió como respuesta:

-¿Y qué si no entro?-, Kyo intentó ponerse amenazador:

-Así sabría si podía terminar contigo ahora... o esperar al torneo...

Iori se acercó a Kyo.

-Mmm.... ¿tú crees que este lugar te favorece?

Iori sonrió y le explicó a su enemigo:

-Esta es... más bien era la aldea de los Yagami, a tan solo unos kilómetros de la capital, aquí nací, aquí me crié...- y caminó a una choza que ya no tenía techo -...en esta choza- y por una rara razón entró dejando a Kyo afuera, este se acercó y vio adentro de la choza: una mesa, tres sillas y una tabla que parecía ser una cama, Iori se sentó allí.

Kyo se disponía a entrar cuando Iori le dijo -No entres, no te lo recomiendo-, Kyo lo miró con fijeza -¿Me intentaras matar?- pero negó con la cabeza -No, pero no quiero que veas algo... Ya, entra si quieres-. Kyo entró brincando un tronco caído, no vio nada importante... hasta que volteó a una esquina, con horror dio unos pasos atrás y se puso la mano en la cara -¿Quién es?

Iori se levantó y vio lo que a Kyo le había llamado la atención: un cadaver calcinado que parecía haber estado siempre en la intemperíe -¿El? seguro algún familiar... ¿te asustaste?-, Kyo se calmó -No estoy acostumbrado a ver muertos sin previo aviso... ¿hay más?- con lo que Iori salió.

Iori miró a otra choza -Alli vivía una vieja bruja... su cuerpo también debe estar allí ¿lo quieres ver?- con lo que Kyo negó, Iori siguió caminando hasta que se detuvo en seco -¿Que pasa?- preguntó Kyo ya que su enemigo se detuvo frente a un claro lleno de cenizas -¿Ves esos bultos? míralos más de cerca-, Kyo se inclinó a uno y observó un cráneo, de nuevo retrocedió -¡Haces esto por placer, ¿verdad?!- dijo furioso.

Observó de nuevo la aldea: por todos lados había bultos de cenizas -¡¿Todos esos son cadáveres?!- Iori asintió, Kyo volvió a preguntar -¡¿Qué demonios pasó aquí?!-, Iori lo miró de nuevo con esa mirada triste -Te lo explicaré... pero vayámonos de este lugar- con lo que empezó a caminar hacía un lado.

Kyo lo siguió esperando que Iori se detuviera o comenzara a hablar.

-No estoy muy seguro, yo no estuve aquí ese día... ese día estaba con mi padre entrenando lejos (Iori baja la vista al decir padre)... dos traidores, tal vez esclavos, tal vez de la familia se rebelaron contra nosotros así que quemaron toda la aldea matando a todos, solo sobrevivió uno de ellos- Kyo preguntó:

-¿Cómo pudieron hacer eso? supongo que toda tu familia también usaba la flama púrpura así que no podían ser dañados con eso....

Iori se detuvo y miró a Kyo a los ojos -¿Como entrenabas tú con tu flama?-, Kyo explicó que lo ponían a lanzar flamas usando su energía -¿Sin nada?-, Kyo asintió -Bueno, los Yagami entrenamos diferente: para tener más fuerza en la flama nos ponían un líquido especial, algo asó como un combustible para hacerla más difícil de controlar... los traidores tomaron una gran cantidad del combustible y lo regaron por toda la aldea, una flama y ya.

Kyo lo detuvo -¿Cómo lo dices con tanta seguridad si no estuviste allí? ¿Cómo sabes que eran dos y que eran rebeldes y que usaron el combustible?- Iori tardó en responder -No veo otra forma... cuando llegué con mi padre a la aldea todo aún había algunas flamas, todos estaban muertos, vimos a dos personas correr... pero seguro uno murió porque también estaba en llamas.

Avanzaron más, por un momento Kyo creyó que Iori tenía miedo... lo confirmó cuando se detuvo una vez más -No... eso no- por un momento creyó que Iori se iba a desmayar o algo por el estilo cuando sucedió algo extraño, fue demasiado rápido por lo que no pudo reaccionar hasta que ya estaba hecho: Iori lo había abrazado hundiendo su frente en su hombro.

Sollozaba, Kyo no entendía el porqué... lo único que hizo fue darle una caricia en la espalda -¿Qué sucede?- Iori no se movió y señaló a un árbol. Se veía un pequeño tronco caído sobresalir por un lado, Kyo se movió hacia el árbol... cuando vio una imagen desgarradora: el cuerpo de un niño también calcinado recargado al árbol, Iori dio -Seguro el fuego lo alcanzó también, corrió hasta aquí... no llegó al lago que esta un poco más lejos...

Iori se separó de Kyo con un poco de vergüenza -Disculpa, yo...- pero Kyo lo interrumpió -No te preocupes, eres humano... ¿verdad?- Iori le dijo -Larguémonos de aquí, no quiero que los espíritus de este maldito lugar nos encuentren-. Kyo se burló -¿Crees en los fantasmas?-, Iori respondió -¿Y por qué no? Si he visto a un demonio despertar para destruir al mundo...

Después de una hora pudieron salir del bosque -¿Ya me habías visto o por qué tardaste tanto en llegar a la aldea?- Iori respondió -No recordaba bien el camino... entraré al torneo-, Kyo lo observó -Pues nos queda una hora para llegar al aeropuerto... si quieres te puedo llevar en mi motocicleta...-, Iori negó con la cabeza.

Iori se empezaba a retirar, Kyo no creía que se despidiera de él pero sólo lo miro por encima de su hombro -Gracias por acompañarme-, Kyo repitió -Gracias por confiar en mí-. Una vez que Iori ya estaba lejos Kyo fue por su motocicleta, cuando lo alcanzó se detuvo -Si quieres usa mi casco para que no vean quien eres...- Iori volvió a declinar, Kyo continuo -Realmente quiero ser tu amigo.

Kyo se mantuvo en su posición, Iori sonrió -Si quieres ser mi amigo por qué me dijiste en el bosque que querías acabar conmigo-, Kyo no supo qué decir pero Iori tomó el casco -Esta bien, pero no corras muy rápido... no estoy muy acostumbrado a estas cosas- con lo que subió detrás de Kyo y lo tomó con firmeza de su cuello.

***

Continúa...

[Capítulo 4: En el aire]        a IorixKyo Archive]

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IorixKyo Archive Noviembre 2000