Llegendes de Foc
~ Jocs Perillosos ~
Fanfic por [Artemis] x [MiauNeko]
Capítulo 4: Una Amistat, Un Passat Feliç
{Una Amistad, Un Pasado Feliz}
Han pasado cuatro horas desde el enfrentamiento de los dos jóvenes señores del fuego. Ahora Iori esta paseando por la playa tranquilamente pero algo desorientado.
- Por qué demonios hoy, el día en que cumplo 20 años, no puedo atacar a Kusanagi? Por qué mi padre me ha atacado de esa forma? Ya sé que le he desobedecido, pero él siempre me ha dicho que tengo que acabar con los Kusanagi, que tengo que acabar con Kyo, entonces... por que hoy no? Por que es tan importante este día? Solo por que un amigo de mi padre murió este mismo día hace veinte años?... un momento... desde cuándo mi padre tiene amigos? Esto es una estupidez... como debe encontrarse Kyo? - va diciendo Iori mientras pasea por la abandonada playa a poca distancia de la ciudad, en esta época del año nadie viene aquí, sería una tontería bañarse a estas temperaturas. En un momento se detiene pensando en lo que acaba de decir - Que me importa a mí que Kyo se encuentre bien o mal? - se dice y continua andando.
- Yagami-san, espere! - grita una voz a su espalda, Iori se gira y se encuentra ante dos ninjas... de su clan? No le resultan familiares y no se fía, porque hace mucho tiempo que no va por su casa y ha dejado de fijarse en sus ninjas.
- Que queréis? - les dice mirándolos amenazantes. Los ninjas parecen algo alterados al tener que hablar con él y no acaba de entender el porque, hasta que uno de ellos se adelanta dirigiéndose a él.
- Yagami-san, somos ninjas del clan Kusanagi - en esto Yagami sonríe cruelmente y se pone en posición de ataque, le irá bien un poco de ejercicio - No, por favor, Yagami-san, no hemos venido a enfrentarnos a usted, nuestro señor, Kusanagi-sama, nos ha pedido que le buscásemos para darle un mensaje - le dice el ninja sin ponerse en posición defensiva esperando que este Yagami tenga algo de cordura y no ataque a quien no se defiende.
- Qué mensaje? Que me va a matar por lo que le he hecho a su hijo? - dice Yagami irguiéndose y aun sonriendo.
- No, Kusanagi-sama nos ha pedido que le buscáramos para decirle que su padre, Yagami-sama, se encuentra en el hospital muy enfermo. Si quiere ir a verlo nosotros podemos facilitarle la dirección e incluso podemos llevarle hasta allí. - Iori no puede evitar sorprenderse, su padre en el hospital? Bueno en verdad estaba bastante mal, pero... bueno su padre siempre le ha parecido una persona demasiado fuerte para caer tan pronto en la sangre de Orochi.
- Lo sabe mi madre? - le dice al ninja, este no le mira muy alegremente, no le gustan los Yagami pero es fiel a su señor y haría cualquier cosa por él.
- Hemos intentado decírselo pero no hemos podido acercarnos a su mansión por culpa de los ninjas de su clan, Yagami-san - le dice con una voz algo molesta, puesto que bastantes ninjas del clan Kusanagi han sido heridos al intentar dar la noticia.
- Y vosotros me llevaríais al hospital sin hacerme nada? - pregunta el joven sarcástico.
- Yagami-san, sabemos perfectamente que nosotros no podemos hacer mucho para vencerle, además, si lo prefiere, solo yo le acompañaré - se ofrece el ninja intentando mostrarse firme.
- De acuerdo, solo tú, los otros que se vayan. Cae muy lejos el hospital de aquí? - dice aun sonriendo sarcásticamente para ver hasta donde puede llegar este ninja.
Este se gira y hace una señal a los demás para que se vayan, y estos obedecen sin decir palabra. Iori sonríe sorprendido y complacido.
- Esta a quince minutos andando de aquí - dice el ninja quitándose su traje de lucha.
- Vaya, parece que ya estabas preparado para acompañarme - sonríe Iori al ver que debajo del traje lleva una camisa negra y unos pantalones negros no muy ajustados, al quitarse la parte de su traje que le cubre la cara Iori puede ver que el ninja tiene los cabellos de color castaño claro, casi rubios, y cortos, parece unos años mayor que él, aun que su aspecto es bastante femenino ya que su cuerpo se ve pequeño y algunos de sus rasgos parecen los de una mujer. Realmente, piensa Yagami, podría parecer una mujer. Si no fuera por su voz algo grave y sus movimientos, que a Iori le parecen masculinos pero forzados, lo habría confundido con una mujer seguro. El ninja le mira inquisitivamente con sus ojos de color verde. Iori puede acabar de confirmar que este ninja no esta muy contento teniendo que hacer de guía.
- Si me hace el favor de acompañarme - dice el ninja manteniendo un tono de voz regular, intentando no mostrar su enfado. Empieza a andar saliendo de la playa con Yagami detrás.
- Tú, ¿como es que el padre de Kyo sabe que el mío esta en el hospital? - dice Yagami al cabo de cinco minutos de andar, puede suponerse la respuesta pero le agrada molestar a este ninja.
- Mi señor Kusanagi-sama y Yagami-sama se encontraban en el hospital y Yagami- sama ha empezado a sentirse mal.- le dice el ninja sin querer mirar al joven de su lado.
- Y por que estaban en el hospital? - le dice Iori algo confuso, él creía que a su padre le habría dado el ataque en el cementerio.
- No se lo puede imaginar? - dice el ninja algo sarcástico.
- Eh tu, mantén el respeto - le dice Yagami mirándolo cruelmente ante el tono de voz del ninja.
- Mi nombre es Alex, no me llamo Tu. - dice el ninja girándose para mirar a Iori a los ojos, algo molesto. No le agrada tener que ir a acompañar a un joven tan insolente.
En esto Iori se fija mejor en los rasgos del joven, si bien antes se ha fijado en que eran afeminados ahora también ve que no son rasgos japoneses, es bastante extraño que un extranjero sea aceptado como ninja. Pero su acento es completamente japonés, así que seguramente ha nacido en Japón o lleva mucho tiempo viviendo aquí.
- Disculpa... Alex - dice Yagami con un dejo de ironía - me dices que hacían mi padre y el de Kyo en el hospital?
- Han tenido que llevar a Kyo al hospital porque usted le ha herido de bastante gravedad, Yagami-san - le dice el ninja mirándole a los ojos y esta vez demostrando abiertamente su furia.
- Kyo? Desde cuando un ninja puede llamar a un Kusanagi tan informalmente? Además, que tanto puedo haber herido yo a ese idiota?- dice sin hacer caso a la mirada que Alex le esta ofreciendo.
- Yagami-san, yo conocí a Kyo cuando él tenia trece años y yo quince. Mis padres habían muerto hacía unos meses y yo estaba en una pandilla, yo era muy bueno peleando y por eso era el jefe. Un día nos encontramos con Kyo que iba solo por la calle, yo no sabia quien era ni tampoco me importo, y para entretenernos empezamos a rodearle, para mi sorpresa el chico no parecía muy asustado, más bien nos miraba como si fuésemos estorbos en su camino, y eso éramos. Yo me enfade con él, no me gustaba la manera en que nos miraba y me lance directo a golpearlo, pero él me esquivó con una facilidad increíble, yo continué atacándolo y él esquivando, al final mis compañeros también se metieron en la lucha, pero no hubo manera de golpearlo - Alex tiene la vista al frente y sonríe al recordar la escena, un niño de trece años venciendo a una pandilla de chicos de quince, no cree que Yagami le escuche y por eso deja de hablar para imaginarse la escena.
- Y bien...? que paso? - la voz de Yagami le saca de sus pensamientos, se gira para ver si esta bromeando pero ve la cara de Iori como si en verdad le interesase la historia y estuviese esperando la continuación.
- Oh, bueno, al final yo y mi banda caímos rendidos al suelo casi sin aliento y él continuaba de pie, su respiración era normal y nos sonreía, se acercó a mí y me tendió su mano: "Me lo he pasado muy bien con vosotros, lo repetiremos otro día, ne?" me dijo, yo estaba realmente furioso ante este comentario, así que quise golpearle la mano que me ofrecía, pero él pudo coger la mía y de una estirada me levanto del suelo, me soltó e hizo una pequeña inclinación ante mí: "Perdona mi falta de modales, mi nombre es Kusanagi Kyo, tanto gusto", me dijo alegremente yo continuaba molesto con él y me marche con mi banda sin decir nada, pero él gritó: "Espero veros pronto!!" Yo me giré y vi como nos despedía con la mano y, aun no sé el porque, yo también levante mi mano para despedirme. Ese niño... no se... tenía algo especial... Y así pasaron los días, yo y mi banda buscábamos al joven y peleábamos con él, yo no quería admitir que me caía bien pero así era, su carácter me gustaba, no tenía maldad, le gustaba pelear. Yo descubrí cosas de su familia y de la rivalidad que existía entre su clan y el clan Yagami, entonces supe el por que era tan fuerte, pero no parecía importarle mucho - Alex se detiene al notar una mano en su hombro, se gira para mirar a Yagami - Le estoy aburriendo Yagami-san? - dice con un deje de sarcasmo.
- No, pero tengo hambre, no he comido nada hoy y me parece que mi padre aguantara unos minutos más, entremos aquí a comer algo y luego continuaremos. - dice Yagami mirando una cafetería abierta y empieza a entrar sin dejar que Alex le replique.
Los dos entran y se sientan en una mesa al lado de la ventana, Yagami pide que le traigan la tarta de la casa y Alex solo pide un café.
Cuando se los traen Yagami mira inquisitivamente a Alex quien se siente algo incomodo.
- No vas a continuar? - le dice al ver que el ninja no abre la boca.
- En verdad le interesa lo que le estoy contando? - dice el ninja algo irónico.
- Me interesa todo lo relacionado con Kusanagi, o sea que... cuenta - dice Iori con su típica voz de orden, Alex suspira, pone su mano en su barbilla y se apoya mirando la calle.
- Bien, pues por donde iba? Ah, si... me enteré de la rivalidad de los dos clanes como también supe que Kyo estaba destinado a luchar contra el hijo del clan Yagami, o sea, usted. Esto no parecía importarle mucho a Kyo y a mí tampoco, nuestras peleas se hacían menos frecuentes y lo que hacíamos era ir a pasear Kyo, mi banda y yo, íbamos a pescar, a nadar, a correr... tonterías de niños, hasta que... llego usted. Era un día de primavera, Kyo ya tenía catorce años y me lo encontré con rasguños en la cara: "Kyo que te ha pasado?" Pero él no me respondió simplemente se acerco a mí me abrazo y empezó a llorar - en esto Alex detiene su explicación para ver si a Iori le hace gracia que Kyo llorara, pero lo único que ve es a Iori escuchándolo con la boca medio abierta y mirándolo fijamente sin comprender.
- Por... porque lloraba Kusanagi? - dice algo pensativo nunca hubiera pensado en Kyo llorando desconsoladamente en los brazos de alguien, siempre lo ha visto arrogante e imaginarse a Kyo con catorce años y llorando no le resulta ni fácil ni comprensible, piensa en todos los King of Fighters en que ha participado y no recuerda ni una vez en que Kyo no estuviera riendo con sus amigos o concentrado en una pelea con expresión arrogante como la suya propia.
- No puede imaginárselo? - dice Alex mirándolo algo enfadado pero complacido al ver que Iori realmente le esta escuchando - La verdad es que no lo pude saber ese día, pero una semana más tarde Kyo y yo habíamos quedado para ir a mirar unos CD's que habían salido y por el camino me dio las gracias por haberle abrazado ese día, yo le pregunte porque estaba llorando y él solo me dijo una palabra "Iori" - en esto vuelve a callar para mirar al pelirrojo con enfado, este esta con la cucharilla en la boca y muy sorprendido - Por su culpa, Yagami-san, Kyo empezó a cambiar, se volvió más arrogante, nunca más lo he vuelto a ver llorar, pero se que él en realidad nunca ha querido luchar contra usted. Al principio de sus peleas siempre se mostraba algo compasivo con usted, me decía: "Estoy seguro de que Iori no puede ser tan malo... además, nosotros también empezamos nuestra amistad peleándonos, no? Entonces quizá pueda ser amigo de Iori" pero con el tiempo esa compasión desapareció para volverse frustración. Yo y mi banda entramos a formar parte de los ninjas de Kusanagi gracias a Kyo, esos otros ninjas que ha visto son mis compañeros, siempre vamos juntos por orden de Kyo, no somos los más fuertes pero se nos considera un grupo especial, con el tiempo yo he aprendido que es mejor hablar que pelear, por eso hemos venido a buscarlo nosotros - Alex vuelve a callar, Iori se come un trozo de tarta intentando no mostrarse afectado.
- Sé perfectamente que el estúpido de Kyo ha intentado ser mi amigo, pero... nunca lo he creído - dice indiferentemente.
- Ni tampoco ha querido escucharle, Kyo es bueno y ahora... ahora esta en el hospital por su culpa Yagami-san - dice Alex con voz algo rota por la preocupación que siente por su amigo.
- No me creo que Kusanagi este tan mal como me dices, él se recupera muy rápido de las heridas - dice Iori indiferente comiendo otro trozo de tarta.
- Sí, tiene razón, por lo que me ha dicho Kusanagi-sama Kyo podría salir mañana mismo - dice con un tono de voz algo sarcástico.
- Lo ves, lo sabía - sonríe el pelirrojo, su típica sonrisa cruel y falta de piedad.
- Por desgracia si sale del hospital solo, lo más probable es que choque con todas las paredes que encuentre - dice Alex en un tono sarcástico y con furia retenida, Iori se lo mira sin comprender. El ninja sonríe agriamente, se acerca algo más a Iori por encima de la mesa - y esto pasará porque usted, Yagami-san, lo ha dejado c-i-e-g-o - dice esta vez completamente furioso. Para su sorpresa Yagami se queda completamente callado, quieto en su sitio y con los ojos abiertos.
- Q... que!? - tartamudea y luego reacciona, se levanta y agarra el cuello de la camisa de Alex por encima de la mesa, este tiene que apoyarse con las manos en la mesa para no hacerse daño, esta sorprendido ante la reacción de Yagami, como también toda la cafetería, que están mirando a los dos jóvenes - Mientes! - dice Yagami únicamente, sin creerse lo que Alex le acaba de decir. Alex pone una rodilla en la mesa y aprovecha su nuevo punto de apoyo para poner sus manos en las muñecas de Yagami e intentar apartarlas, pero al tocar las muñecas nota que estas están... temblando?
- No miento Yagami-san - dice al fin pudiéndose separar y sentándose de nuevo. Iori al contrario pone sus manos en los bolsillos y saca suficiente dinero para pagar.
- Venga, levántate y vayamos al hospital de una vez - le dice Iori en un tono fuerte y duro. Alex se levanta de inmediato y salen los dos de la cafetería. Cuando ya están fuera Iori coge aire sintiendo que el frío se pone en sus pulmones - Kyo esta en el mismo hospital que mi padre, ne? - dice al fin.
- Si, están en habitaciones bastante cercanas. Es por aquí - dice el ninja empezando a andar, no acaba de comprender el comportamiento de Yagami, acaso él se preocupa por Kyo? Yagami sabe que Alex le esta mirando sin comprenderle y no le gusta, ni tan solo él comprende porque ahora se siente tan... tan mal... no puede dejar de pensar en la imagen de Kyo en el cementerio... arrodillado con las manos en los ojos y él marchándose, dejándolo, abandonándolo... pero no quiere dejar que Alex lo note.
- Cómo es que siendo un ninja hables tanto? - dice para intentar dejar de pensar en su rival.
- Como ya le he dicho somos un grupo a parte, además nosotros nos encargamos de trabajos donde se necesita comunicación, los ninjas también sabemos hablar, sabe? - dice Alex con un deje de ironía. Iori no lo nota y continua andando.
- La verdad, para mí, los ninjas solo sois meros instrumentos - dice algo distraído. A Alex no le sienta bien el comentario.
- No somos instrumentos, señor - dice entre dientes - si algún día se para a hablar con alguno de sus ninjas lo verá. Kyo siempre que puede viene a vernos a mí y a los demás - dice añorando el ver la cara de Kyo - La verdad es que nuestra amistad se ha ido enfriando con los años, cosa que me duele, pero además el nunca me dice como se siente y añoro los tiempos en que me lo contaba todo - dice apesadumbrado y con la cabeza baja. Iori solo se queda callado mirándolo y notando que la voz de Alex se ha suavizado, ya no es tan grave como al principio.
Los pasos de Yagami han ido aumentando la velocidad sin casi darse cuenta, no quiere ver a su padre, quiere... quiere ir a ver a Kyo.
***
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Abril, 2001